P A D R E
Tú no puedes sentir crecer a tus hijos en tu seno,
pero puedes abrigarlos en tu pecho,
el que con amor, teje un lazo estrecho,
construyes tu hogar y de ternura está pleno.
Tú no puedes sentir crecer a tus hijos en tu seno,
pero puedes abrigarlos en tu pecho,
el que con amor, teje un lazo estrecho,
construyes tu hogar y de ternura está pleno.
Para proveer alimento, afrontas arduas faenas,
animas a tus criaturas, alentando sus sueños,
llegas a casa abrazando y besando a tus pequeños:
animas a tus criaturas, alentando sus sueños,
llegas a casa abrazando y besando a tus pequeños:
Estás colmado de nobleza y con cariño ordenas.
Eres su consejero, atiendes y entiendes sus problemas,
educas a tus niños, anhelando para ellos una profesión,
los impulsas a estudiar y en ello dejas el corazón,
los impulsas a estudiar y en ello dejas el corazón,
les das seguridad, transformando tu versar en poemas.
En las manos de Dios has depositado tu confianza,
escudriñas su palabra para guiarlos con inteligencia,
te arrodillas orando al Padre con vehemencia:
En las manos de Dios has depositado tu confianza,
escudriñas su palabra para guiarlos con inteligencia,
te arrodillas orando al Padre con vehemencia:
Eres amigo y en tus vástagos has volcado la esperanza.
Palabras de mi Corazón
De mi autoría
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