Dime que todos tus sentidos están puestos y colocados estratégicamente, ocupando cada uno su posición independiente.
Déjame palpar pausadamente,
permitiendo que floree nuestro jardín secreto, avivando mi interior y percibiendo su sutil esencia.
Derramando su perfume gota a gota, trasminando con cautela un fresco y caudaloso manantial, que seguro llegará al final, cual cascada azucarada en cristalinas aguas.
Beber, sentir el placer y deleitarme con su espesa y suculenta miel, libar como abeja que se posa en una rosa o en un clavel.
Camino verde que sabe a yerba, que arde y se esconde del sol radiante, que pide a gritos una sombra que apacigua su intensa sed.
Camino que ha de seguir el caminante con pies descalzos,bañada de sudor su frente. Anhelante y suspirante.
Ansioso de llegar y descansar, reposar su pálida faz, como jornalero que derrama la sangre de sus manos.
Ya no llores, ya no sufras. ¡Canta, sueña, ama, vive!
Permíteme dejarte a tinta, cual legado escrito en papiro mis deseos.
Deja que como una mariposa disfrute, el terciopelo de los pétalos, que son el vestido y el abrigo de las flores.
Permite me vuelva cautelosa, y me envuelva una suave sensación.
Baña de rocío mi dulce rostro e inunda de paz mi interior.
Cantar de los cantares, viento que sopla de norte a sur, y atraes el trino de las aves,
poeta que envías a tu musa a dictarme al oído, lo que no alcanzaste a escribir.
¡Ah! Corazón eres mi ser, eres mi alma y mi sentir,
No ahogues ni reprimas más tu llanto, déjalo que fluya libremente, deja que se deslice suavemente y así sanarás y ahuyentarás el dolor que alberga tu alma.
Y serás capaz de repartir y dar irrefrenablemente un compasivo y basto amor.
Palabras de mi Corazón
De mi autoría
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